jueves, 16 de junio de 2016

Boom!

Estoy a punto de explotar.

¿Quién te crees que eres para decirme que no puedo sentir lastima de mí misma? No eres nadie, ni nada como yo. A veces pienso que no está mal sentirse un poco victima del mundo. Pues en cierta formo eso somos, no pedimos nacer, nos traen a la vida y uno tiene que arreglárselas después de cierto tiempo. Así que si te molesta que sienta algo de lastima o tristeza por mi existencia, te pido de la manera más atenta que no leas esto y que vayas a chingar a tu madre, pinche ser perfecto.

Puedo decir que ayer tuve un día de esos que son maravillosos, en dónde todo sale "chido" de manera certera, bueno eso al menos a mi favor. Y bang... suena un disparo, sus letales ojos. Y pum... se escucha un estridente sonido que viene de lo más profundo de mi ser porque me la paso extrañando. Y al final, al final tengo que dejar ir muchas cosas. Tengo que purificarme como el agua de Iztapamordor.

Pero... lo que realmente quiero es mandar todo a la chingada. Decirles que me dejen en paz, y que si quieren estar conmigo lo estarán y sino... pues se lo pierden. Soy una persona rara, enojona, loca, medio psicótica y con muchos pedos internos (y no sólo los intestinales), sin embargo, soy una humana que tiene ganas de vivir y de ser feliz.

Porque no lo soy.

Porque siento que exigen mucho de mí. Y porque al final sigo siendo la misma niña mimada y egoísta que estira la mano cada vez que quiere algo. ¿Qué cómodo no?

Y la neta, no lo es.

Está cabrón depender de las demás personas, de siempre buscar aprobación o pertenencia, o de querer sentirme única... o de pensar en que algún día todo mejorara sólo por ser optimista (y no es así). Soy alguien que de vez en cuando pierde el control, se aloca y hasta se desaparece... (cómo hoy). También soy esa parte que odio... la chica que se ciñe a las reglas, que piensa más de cinco veces las cosas antes de hacerlas, la que no quiere riesgos ni hijos, la que intenta adaptarse al pinche sistema de mierda que tanto crítica... soy alguien que se preocupa por los demás, alguien que no tiene tiempo para sí misma pero si para el que lo requiere...

¿Qué no te gusta mi modo de vivir?

Amigo, siempre tuve reglas, desde niña. Date cuenta que no me he ido a la mierda por eso. Dense cuenta de que en cualquier momento me pude haber vuelto una drogadicta o una súper puta o alguna de esas cosas que son "malas". Y la neta lo único malo que le veo a eso es afectar a terceras personas -yo y mi pinche moral-.

¿Qué me la vivo limitada?

Pues a veces creo que sino fuera por eso yo ya hubiera olvidado a mi familia. Cuando es lo más precioso que tengo, mis hermanos, son los únicos weyes que valen la pena. Porque los demás siempre te rompen el corazón. Es tan difícil aceptar que no hay compatibilidad y aún así te vale verga porque amas... te enamoras como vil pendejo. Hasta que pueden más los defectos y los arranques de histeria.

No soy perfecta. Y tú, y tú, y tú tampoco lo eres.

Lo que si soy es alguien que va a estar al pie del cañón. No alguien que te deja medio varado en la nada. Y no importa lo que me hayas hecho... daría la vida por ti. El pedo es cuando existe algo que hayas lastimado, algo muy frágil e importante para mí. Y eso es confianza. Cuando no te tenga ni un gramo de eso... estás no sólo muerto para mí... sino serás una constante reafirmación de lo mierda que es la humanidad.

¿Perdonar? ¿Guardar rencor?

Tal vez, tal vez... sólo si es verdadero.

Así que por favor, por favor... déjenme parlotear y mandar todo muy lejos, sólo por un día, sólo por un momento... quiero desvanecer con el viento porque sé que muy pronto voy a explotar.

Y nada, repito, nada saldrá bien.