miércoles, 20 de junio de 2018

Special K

¿Te acuerdas que te dije que eras ligero y bueno para la salud?
Y que por eso, si fueras un cereal, serías Special K, y obvio también por Placebo.

Intentando escribir un poema que se asemeje a lo que aún no he descifrado del todo lo que siento por ti, me acordé de tal hecho, así que le puse atención a la canción, y me dije... esto no habla de un cereal. Y en efecto, habla sobre una sustancia llamada Ketamina.

Después, todo cuadró.

Hoy, te extrañé muchísimo, yo sé que no tiene ni una semana que te fuiste, pero, en verdad me había acostumbrado a aquella extraña ¿rutina? que teníamos.

Pero de igual manera, me di cuenta que como adicta a las drogas, así te buscaba. Incluso cuando a veces no podías, o yo me encontraba con el tiempo muy apretado, me hacía un pequeño espacio para verte.

El poema va así:

Llevo en mi cabello la mezcla de tu olor
y el tabaco que durante todo el día -ansiosa- fumé.
Un extraño revela el secreto de la noche anterior,
me dice: tus ojos están tristes.
El cielo se rompe,
no quiero despedirme de ti, aún no,
pero no se puede retrasar lo inevitable.
Me acerco a ti, la voz desea no temblar,
tal vez por eso no te dije mucho.
De nuevo no puedo dormir,
quiero fumar, y fumar, y volver a fumar,
sólo para tener el recuerdo más nítido.
Porque yo aún con todos lo que no me dices,
y con todo lo que debo callar,
confío en que sea verdad,
el que allá,
píldora placebo,
me extrañarás.