jueves, 3 de septiembre de 2015

Lo que no escribí hace unos minutos para que fuera ayer

No me dio tiempo,
como cuando quise irte a ver,
como cuando tuve que escucharte.

Pero aún rezo que funcione,
y si no pasa...
la magia no se extinguió,
es que ya no sabemos como usarla.

Camina feliz,
observa al universo, es tuyo.

miércoles, 2 de septiembre de 2015

No Aniversario

No tiene mucho que conocí a un chico interesante en una fiesta, él iba solo, no conocía más que a la persona que lo invitó, así que le hice la platica, me enteré de cosas muy interesantes sobre él, y poco a poco me di cuenta de que me empezaba a gustar, teníamos cosas en común. Los dos estamos bien mal de la cabeza. Así que le pedí "no matrimonio", y el alegremente aceptó, ahora vivimos una no relación, cada quien convive con sus propios demonios, a veces nos escribimos o intercambiamos música, en cierta forma el conocernos fue algo bueno, ampliamos el panorama de posibles amistades y nuevos sueños.

Pero, el día de hoy se conmemora por ser el día de no aniversario, hace cinco años comencé a salir con E2, igual llovió a cantaros como ahorita, igual me sentía nerviosa e intranquila, igual también estaba enamorada de él.

Quise correr hacia su casa para decirle que era el día perfecto para continuar lo que dejamos pendiente, y como cada vez que lo veo, besarlo y abrazarlo de manera que jamás pudiera escapar de mí. Lo extraño todos los días y en cierta forma, igual que él, ya me acostumbré.

Amar a E2 es una extensión de lo que ahora soy, creo que si no lo amara no sería en este momento yo, no quiero decir que no lo fuera antes de hacerlo sino que ahora se ha convertido en otra parte mía. Tampoco quiero decir que lo necesito para vivir, o que necesito su amor o algo así, No. Él es libre, como yo soy tan sublime como las nubes.

Hoy fue un día lindo, agitado, lleno de cosas que hacer, y esos son los días que últimamente me van gustando más, porque me dan oportunidad de no pensar más allá y no ver todo lo que dejé atrás. Salí con tres amigos a cotorrear, primero con el chico Cósmico, de él me gusta mucho su voz, me hace recordar la voz de alguien a quien una vez quise con demasía. Después me vi con el principe de Kentucky, comimos helado mientras me comentaba el transcurso de una vida adulta a la que un día llegaré y por último vi a Emiratos Árabes pasé un momento tan agradable con él al escuchar música mientras regresabamos a esa ciudad que vio crecer el amor que le tuve a él. Todos ellos hicieron que recordara pequeños fragmentitos de él, y siempre él, incluso cuando estaba contigo Diamante, él, él, y él... como la sombra de algo que no se va.

(Y no me queda más que abrazarlo)

Creo que los no festejos, son parte de lo que ahora está en voga en mi ser, los no compromisos, los no sentimientos. Hacer las cosas sin darle significado. No siento que me vuelva una persona desechable es sólo que es mejor ignorar y como si fuera arte de magia el NO le da ese sentido sabroso de hacer las cosas sin culpa. ¿Entienden a lo que me refiero?

Feliz No Aniversario, E2...

...y en el fondo si duele mucho que sea un NO.


martes, 1 de septiembre de 2015

Patinar

El día de hoy salí a patinar como lo he estado haciendo desde hace una semana cuando el chico del auto azul, como lo llama mi papá, me los trajo sanos y salvos después de una operación en casa de Mono. Y si de por sí ya no tengo pompas, ahora menos, se aplanaron por el sentón que me di al dar la vuelta para regresar a casa.

Me gusta salir en las noches y sentir el aire frío mientras extiendo mis brazos y dejo que las llantitas de los patines hagan su trabajo. A veces alzo la cabeza para poder ver las poquitas estrellas que se alcanzan a divisar por mi colonia que desde hace cinco años está poco iluminada, hay una deuda o algo así en realidad no me interesa mucho porque puedo ver las lucecitas de la noche.

Salí a patinar para poder fumar el último cigarrillo del día, era necesario. Aunque ahora me duele el estomago. Esta noche papá dio otro de sus sermones llenos de sabiduría pero también escepticismo sobre los límites de las intenciones de las personas, ya no quería escucharlo y no es porque diga cosas malas es porque a mi también me gustaría ser escuchada. Él lo hace, pero no muy seguido, y me agrada que sea así, puede ser que por esa razón nuestra relación ha durado muchos años.

El abismo del silencio que existe entre la distancia de un asiento a otro en el sillón es reconfortante, papá hace que ese espacio sea único y nuestro. A él no le gusta que fume, como a la mayoría de personas que me conoce, es por eso que me salgo de manera tan abrupta, para no incomodar y para que no me regañe. No me gusta verlo molesto conmigo. Papá es la mejor persona del universo pero también es la más maquiavélica.

Mientras patinaba pensaba en analogías sobre la vida, llegué a la conclusión de es estúpido decir "la vida es como fulanita cosa... bla bla bla", porque la vida simplemente es eso, vida. Empecé a reír como loquita mientras las personas que hacen ejercicio nocturno o las que sacan a pasear a sus amigos caninos me veían como si fuera un objeto curioso y peligroso; reí más.

Claro que hubo un momento de decisión en el cual estaba el conflicto entre dar otra vuelta más o regresar, la señal me la dieron los perros, odio que me persigan, sobretodo porque tiene mucho que dejé de patinar así que soy torpe y al acelerar me puedo medio matar. Sentí miedo, y el miedo es lo que nos hace caer, detenernos o seguir.

Así que a la hora de regresar tenía un extraño presentimiento de caerme, uno mismo se hace bromas de mal gusto. Porque en la tarde pasé a dejar a una amiga más lejos y no tenía miedo a que pasara algo malo, confiaba en los patines, en mí y en todo el universo. Pero hace rato pum, adiós pompitas de lechuga. Tuve miedo y no sólo fue la caída, incluso antes me andaba tambaleando, después me caí, y para rematar me enfrenté con los perros que tanto detesto. Todo eso en menos de cinco minutos.

Tal vez eso deba enseñarme a no salir a patinar en la noche o ahorrar para comprar un casco y rodilleras e incluso a ser más precavida. Sin embargo, sé que no lo haré y que mañana, como hoy, volveré a patinar.



Rolita para caerse a gusto: